Rina Sanjo, una chica de piel oscura, tiene sentimientos por su amigo de la infancia, Zen Narasaki, quien es poco atractivo. Zen es obligado por Rina a usar un disfraz de oso, y ella encuentra reconfórtale esa imagen. Desde niños, jugaban a disfrazarse y, con el pasar del tiempo, Rina comenzó a chuparle el pene a Zen. Así habían sido siempre. sin embargo, Zen expresa que quiere terminar con esa relación, marcando un punto de inflexión. Con un aire de desesperación, Rina revela sus verdaderos sentimientos. Es porque eres tú, Zen… quiero vestirte así. Es porque eres tú, Zen… quiero tener sexo contigo. Y finalmente, sus sentimientos se alinean, sumergiéndose juntos en un mundo lleno de amor y pasión.
